Cada pieza es única.
Y cuenta una historia diferente.
Una historia hecha de inspiración y transpiración.

En el corazón de Europa, en Alemania, se extraen grandes
rocas de arcilla. Los camiones van y vienen, las grúas tallan.
Bloques de tierra, envejecida por el paso del tiempo y transformada en arcilla.
Arcilla coloreada mediante óxidos naturales. Por procesos de la naturaleza.

Material natural, la arcilla combina uno o más minerales con posibles trazas de metal. Óxidos, materia orgánica y agua atrapada en la estructura mineral.

Dependiendo de la naturaleza del suelo en el que se encuentra, la arcilla puede aparecer en varios colores; desde el blanco, gris o marrón a rojo anaranjado intenso.

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